¿Cómo elegir la almohada correcta para tu descanso?

Por DAVID SALCEDO HERNÁNDEZ

• De la correcta elección de una almohada puede depender tu productividad y entusiasmo para las actividades diarias

Dormir es una de las funciones más importantes que requerimos todos los seres vivos, ya que un buen descanso ayuda a pensar claramente, reaccionar rápido y a mejorar nuestra memoria a lo largo de nuestras actividades diarias.

De acuerdo con la fundación Vivo Sano, la falta de sueño o dormir mal provoca que tomemos malas decisiones, estemos de mal humor y, en general, que nuestro desempeño durante las horas activas no sea el más óptimo.

Por eso, los elementos del descanso, como un buen colchón o una almohada adecuada son importantes, aunque este último elemento casi no es tan considerado al momento de hacer compras relacionadas con el sueño.

Las almohadas desarrollan unos de los papeles más importantes durante el sueño, tanto así que la Sleep Foundation tiene una lista de recomendaciones para que las personas puedan tener el mejor descanso.

LOS BÁSICOS DE LA ALMOHADA

Primero debes considerar la composición y el relleno, por ejemplo, aquellas que tienen plumas suelen ser blandas, pero tienen un buen punto de regreso, no sujetan bien el cuello y mantienen la espalda semirecta.

Este tipo de almohadas son ideales para aquellos que duermen boca abajo y no tanto para personas robustas o que se muevan mucho en la noche.

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Las de látex son sintéticas o mezclan materiales naturales con el Látex. Este tipo de almohadas sujetan bien la cabeza, son firmes, ideales para personas pesadas, alérgicas a ácaros y para quienes duermen de lado. 

Mientras que las sintéticas 100% suelen ser de espuma o poliéster para evitar cualquier tipo de alergias. Normalmente son muy blandas, ideales para personas que no pesan mucho, como niños o adultos mayores.

Algunas tienen el “efecto memoria”, es decir, tienen un efecto viscoso para sostener el cuello, por lo que se recomienda en personas que no se mueven mucho por las noches. 

Con base en esto puedes escoger su grosor, para que no sea muy grande o muy pequeña para tu cuerpo, pues tu columna siempre debe estar alineada con tu cráneo para evitar fracturas, ronquidos o incomodidades.