Centro Coyoacán se despide para siempre
La despedida de Centro Coyoacán fue acompañada de mariachis y el anuncio de la inauguración del mall Mítikah
- El recinto cerró sus puertas para dar paso a las nuevas experiencias comerciales que ofrecerá Mitikah
Por: STAFF
Luego de 33 años de recibir a miles de personas en sus diversas tiendas, la plaza Centro Coyoacán cerró sus puertas de manera definitiva el pasado 19 de septiembre para darle paso al nuevo mall Mítikah.
Este icónico centro comercial, ubicado en Circuito Interior Río Churubusco y Avenida Universidad, será derribado en los próximos meses.
Por su parte, el desarrollo de usos mixtos de Mítikah contará con tres torres de oficinas, las cuales incluyen 675 departamentos habitacionales, algunos consultorios médicos, un hospital y el centro comercial que se inaugura el viernes.
El complejo Mítikah espera recibir entre 50 y 60 mil personas a diario tras su inauguración el próximo 23 de septiembre a las 11:00 horas. Este nuevo mall tiene cinco pisos y una capacidad comercial de 280 locales para negocios, así como un Palacio de Hierro, tienda ancla de la nueva sede.
Algunos negocios que podrás encontrar en sus cinco pisos son Liverpool, Cinepolis, Recórcholis, Lego, Hugo Boss, Victoria’s Secret, Pandora, Armani y Abercrombie
Despedida emotiva
Tras anunciar su cierre oficial, los vecinos del centro comercial y algunos visitantes de otras áreas organizaron una despedida con mariachis que cantaron y bailaron para despedirse de este icónico lugar.
Entre aplausos, gritos y abrazos, las personas cantaron y realizaron la cuenta regresiva del cierre de Centro Coyoacán.
Algunos usuarios mandaron mensajes por medio de redes sociales: “El fin de una era. Adiós para siempre Palacio de Hierro Centro Coyoacán”.
“A penas me entero que van a demoler el Centro Coyoacán, una plaza comercial de las más viejitas de la CDMX. Muchos recuerdos ahí para muchos de nosotros , que lástima”, escriben.
Los visitantes señalaron que el momento estrella se lo llevó el cantó Las Golondrinas, interpretadas por los mariachis, quienes invitaron a los asistentes a acompañarlos entre abrazos y gritos.