Así puede afectar tu economía el colesterol alto
Padecer colesterol alto se convierte en una afección que impacta en el estilo de vida del paciente, pero también en su economía familiar
Por DAVID SALCEDO HERNÁNDEZ, Con Información de NOTIPRESS
- Padecer colesterol alto se convierte en una afección que impacta en el estilo de vida del paciente, pero también en su economía familiar
Al menos 4 de cada 10 adultos en México tiene niveles de colesterol alto, según el Instituto Nacional de Cardiología, lo cual los hace sufrir alguna afección cardiaca o cerebrovascular, pero también agota lentamente la economía familiar.
Ejemplo de ello son las consultas con el nutriólogo (que se recomiendan semanalmente) y las cuales pueden costar desde los 800 hasta los mil 200 pesos; sumado a esto, suelen haber medicamentos de por medio, como Atorvastatina, Ezetimiba, Alirocumab o Evolocumab, cuyo precio suele estar por encima de los 500 pesos por tableta.
El colesterol por sí mismo no es malo, pues el hígado produce colesterol por medio de membranas celulares y hormonas necesarias para hacer funcionar al organismo.
El problema es cuando hay demasiado en el torrente sanguíneo, pues impide el flujo de la sangre y otros líquidos.
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Joshua Septimus, doctor y profesor asociado de medicina clínica y director médico del Houston Methodist Primary Care Group explicó que no controlar los niveles de colesterol puede traer consecuencias.
“El hígado produce el colesterol necesario, la parte complicada es la dieta y hábitos de estilo de vida, factores que influyen en los niveles de colesterol”, precisa Septimus.
El colesterol es una sustancia fundamental en el cuerpo ya que mantiene la integridad estructural de las células, produce hormonas y también produce vitamina D, pero sus niveles altos pueden generar lipoproteínas (moléculas compuestas por proteínas y grasas encargadas de transportar el colesterol) de baja densidad en el torrente sanguíneo.
Las señales del colesterol alto son dolor en las piernas al momento de caminar, entumecimiento o debilidad repentina en brazos y piernas, así como dificultad para hablar, pérdida temporal de la visión o disminución de la presión arterial.
Los altos índices suelen ser silenciosos, pero se pueden evitar al restringir el consumo de alimentos procesados, con altos niveles de grasas saturadas, así como el alcohol y tabaco.
Conforme a la OMS, las enfermedades cardiovasculares son las más mortíferas, cada año cobran más de 17 millones de vidas en todo el mundo.