Lo que debes tomar en cuenta al escoger un casco de motociclista

Por DAVID SALCEDO HERNÁNDEZ

• Al elegir un casco para motocicleta recuerda que lo más importante no es el diseño exterior, sino la seguridad que provee

Manejar un vehículo con un motor siempre es peligroso, más aún cuando no se cumplen las medidas de seguridad necesaria, ya sea un auto de grandes dimensiones, un coche regular o una moto. Por eso es importante llevar accesorios básicos en todo momento.

Cuando se maneja una motocicleta sí o sí se debe llevar casco, ya que la tasa de mortalidad entre estos conductores (junto con los peatones y ciclistas) es del 60% por ciento por accidentes de tránsito, según el Instituto Nacional de Salud Pública.

Además, el no llevarlo o utilizarlo de forma incorrecta equivale a una multa que puede ser de 10 a 20 veces la Unidad de Medida y Actualización Vigente (845 a 1,690 pesos), remisión de la moto al depósito vehicular y te anotarás 3 puntos de penalización en la licencia de conducir, según el reglamento de tránsito de la CDMX.

“El casco cubre de las partes más importantes del cuerpo, que es la cabeza. Especialmente en los accidentes, la mayoría de las muertes ocurren por un casco no adecuado, y al momento de caerte lo primero que impacta es la cabeza, es lo primero que se fractura”, señala Carlos Ernesto González García, dueño del canal Roca Rider en Youtube.

Pero escoger este accesorio no es nada fácil, ya los hay de todos los tamaños, formas, marcas y de distintos materiales; unos más bonitos, otros no tanto, por eso, el propietario de la tienda de accesorios Roca Rider nos regaló los mejores tips para que escojas el casco ideal para tus viajes.

PRIORIDAD ABSOLUTA: EL MATERIAL

Aunque todos parezcan iguales por fuera, la verdad es muy diferente, ya que cada casco está hecho de un material muy específico, lo cual determina su durabilidad, resistencia a los golpes y el precio.

“Lo principal son los compuestos con los que están hechos los cascos”, dice González.

“La mayoría de los que son bastante económicos resultan poco recomendables, pues están hechos de policarbonato”, señala Carlos Ernesto, haciendo referencial Tricomposite.

Este compuesto está hecho de diversos plásticos mezclados, los cuales son poco seguros, pues se rompen con cualquier caída e incluso de un puñetazo, se les reconoce porque no tienen ningún tipo de certificación.

“El de fibra de vidrio tiene mayor durabilidad y seguridad en el tema de golpes, pero los verdaderamente premium están compuestos de fibra de vidrio con fibra de carbono. Estos son utilizados en competencias y son considerados gama alta”, añade el experto.

Los cascos de fibra de vidrio recisten los impactos duros de una caída, aunque se pueden rayar o rajarse no se rompen con cualquier golpe, mientras que aquellos hechos de fibra de carbono, pese a ser muy ligeros, son de los más resistentes y absorben tan bien los impactos que se expanden por el efecto de absorción.

Estos los puedes distinguir porque en la parte trasera tienen un estampado de certificación DOT, ECE, SNELL, NBR o NTC.

NO HAY ESTILO SIN FUNCIÓN

Es el atractivo visualmente más grande que tienen los cascos, pues algunos parecen deportivos, otros más choperones y unos más clásicos; pero también es importante relacionar el estilo con la seguridad.

Lo más recomendable, de acuerdo con el propietario de Roca Rider, es llevar un estilo integral, el cual es completamente cerrado, ofreciendo una protección total desde la barbilla hasta la punta de la cabeza.

“Los cascos integrales son los más seguros porque su compuesto es de una sola pieza, son completamente cerrados, por lo que absorben todo el golpe; sin embargo, los cascos más comunes y cómodos son los modulares o abatibles”, dice González.

Los cascos modulares cuentan con la ventaja de abrir la mentonera, esto permite la circulación del aire y (en caso de que vengan un acompañante) poder comentar algo y que te escuche; desafortunadamente, al ser un artículo de dos piezas con el tiempo suelen fallar los engranajes y, si se rompe una parte, hay que comprar nuevamente otro; además, debido a su sistema abatible son más pesados.

Otra opción son los de estilo jet: “estos no cuentan con la parte del barbillero. Son más recomendables para la ciudad, donde no vas a tan altas velocidades”, indica Carlos. 

Estos modelos son muy cómodos de usar, especialmente cuando hace calor, ya que no cubren toda la cabeza, únicamente la parte trasera y los laterales; sin embargo, por eso mismo la cara queda al descubierto y de vez en cuando es protegida por una pantalla o unos lentes opcionales para el motociclista.

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“De manera general yo recomiendo el casco integral para ciudad y carretera, y en segunda opción el modular o abatible. Hay que subrayar que lo más importante no es el estilo, sino la seguridad. No sirve que se vea bonito si no te va a proteger lo suficiente”, advierte el motociclista.

Considera la duración de tu casco: primero que nada, debes tener en cuenta que el tiempo de vida de un casco es de 5 años si es de fibra de carbono, pero los de fibra de vidrio suelen durar de 3 a 4 años, por lo que pasado ese lapso probablemente debes pensar muy seriamente en adquirir uno nuevo.

Además, si ya sufriste una caída con él, este ya no te protegerá igual.

“Un casco no debe acumular golpes porque se le generan grietas que no son perceptibles, y cuando suceda una nueva caída fuerte ya no va a tener la absorción necesaria. Eso es un foco para que cambies tu casco”, recomienda González.

Si eres un aficionado del motociclismo, o si estás por iniciar en este mundo, recuerda que lo primero es la seguridad y la función del casco, los accesorios y el buen estado del vehículo.