Cereales de caja: deliciosos, pero, ¿recomendables?
El consumo constante de cereales representa una fuente de carbohidratos y azúcares; te decimos cómo integrarlo sanamente a tu desayuno
Por CARLOS YÁÑEZ
- El consumo constante de cereales representa una fuente de carbohidratos y azúcares; te decimos cómo integrarlo sanamente a tu desayuno
Desde hace ya mucho tiempo nos han dicho que el desayuno es el alimento más importante del día, que “hay que desayunar como rey, comer como plebeyo y cenar como mendigo” y una serie de discursos (algunos con sustento médico o científico y otros, no tanto) en torno al primer alimento que consumimos en el día.
Desde la “aparición” de los sellos en los empaques, nos dimos cuenta que casi todo lo que consumimos contiene uno o varios ingredientes de los que deberíamos preocuparnos, o al menos dedicarles un poco de atención.
Los cereales de caja no son la excepción y hay algunas cosas que debes saber antes de comprarlos o consumirlos.
¿CÓMO SURGIERON?
Los cereales de caja surgieron por accidente, se les atribuyeron propiedades que en realidad no poseían y con el paso del tiempo se les agregó azúcar para hacerlos más atractivos para los niños (aunque a los adultos también nos encantan).
La obra estuvo completa con los llamativos colores, el proceso de inflado y el crecimiento exponencial de la industria del desayuno.
Aquí es donde surge la pregunta ¿es saludable consumir cereal de caja?
Tristemente, la respuesta es que no es lo más recomendable: son altos en azúcares, carbohidratos y sodio, (sin mencionar los colorantes que contienen).
El mito de que son saludables proviene de la historia de los hermanos Kellog, quienes consideraban que la fibra era dañina para el intestino y la eliminaban de sus productos en busca de una dieta “mejor” para sus pacientes.
TE DECIMOS CÓMO CONSUMIRLOS
“Aunque no hay alimentos malos, el consenso dice que lo ideal es evitarlos o moderar su consumo. Es decir, seguramente no te hará daño si lo consumes esporádicamente (una vez a la semana o menos) pero si lo consumes frecuentemente, seguramente tendrá algún efecto en tu salud”, advierte Andrea Fragoso, nutrióloga por la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, profesional consultada por LAS BUENAS COMPRAS para este artículo.
Sin embargo, ello no significa que debamos eliminarlos de nuestra dieta, sino más bien moderar su consumo y acompañarlos de otros alimentos que proporcionen vitaminas y minerales para conformar un desayuno nutritivo y balanceado.
Fragoso Villavicencio señala que los alimentos no pueden ser clasificados en términos completamente positivos o completamente negativos.
“No hay un solo alimento que por sí solo pueda ser ‘bueno’ o ‘malo’, depende de las metas y necesidades de las personas, el tipo de cereal de caja, la cantidad que consumimos y, en general, la dieta habitual que llevamos. En algunos casos podría ser un alimento útil, pero habría que evaluar más aspectos”, detalla.
REVISA LAS OPCIONES Y EL CONTENIDO DE LOS CEREALES
El cereal se ha hecho increíblemente popular y es parte importante del desayuno en las mesas de todo el mundo.
Conforme avanzó la industria y la tecnología, surgieron una incontable cantidad de variantes y se les adicionaron nutrientes, sin embargo, su delicioso sabor debe acompañarse de leche y servirse en porciones recomendadas para evitar la ingesta elevada de calorías.
Sobre los cereales de caja más recomendables, Andrea Fragoso considera existen varias opciones en el mercado, pero “depende del cereal en cuestión, honestamente yo no recomendaría un cereal alto en azúcares añadidas. Desafortunadamente los más llamativos y populares son aquellos que tienen mayor cantidad de azúcar añadida, y claro, son los más consumidos”.
TE DECIMOS POR QUÉ INCLUIR EL YOGUR EN TU DESAYUNO
Actualmente y como respuesta de la industria ante las nuevas regulaciones, ya existen cereales que no tienen sellos, que incluyen más fibra y que pueden formar parte de un desayuno saludable.
Sin duda, seguirán siendo el momento delicioso y dulce de la mañana e Incluir fruta, yogur, cereales integrales como avena o amaranto y complementar el desayuno con huevo y otras fuentes de proteína, ayudarán a mantener una dieta sana.
De acuerdo con la nutrióloga Andrea Fragoso, balancear el desayuno es lo más sano y en realidad no es tan complicado como pareciera.
“Se sugiere que todas nuestras comidas sean variadas y que aporten micro y macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas, lípidos). Por ejemplo: 1 taza de fruta+ 1 sándwich + café, té o 1 vaso de leche descremada”, recomienda.
Identifica el cereal que cumpla mejor con tus necesidades de alimentación y recuerda que según su contenido calórico, de carbohidratos y azúcares, proveerá una buena parte de los requerimientos diarios.
“Para encontrar un buen cereal, podemos tomar como guía la cantidad de sellos en el etiquetado frontal. Los ingredientes (especialmente los primeros en la lista) y la declaración nutrimental”, finaliza Fragoso.